Un informe reciente de la Organización para la Alimentación y la Agricultura (FAO) destaca el papel crucial de los 1.300 millones de jóvenes en el mundo, que se encuentran entre los 15 y 24 años, en la transformación de los sistemas agroalimentarios. Esta generación enfrenta desafíos significativos, como aumentar la producción alimentaria, reemplazar a una fuerza laboral envejecida y adaptarse a fenómenos climáticos extremos.
Casi el 85 % de la juventud global reside en países de ingresos bajos y medianos bajos, donde los sistemas agroalimentarios son esenciales para sus medios de vida. La FAO subraya que mejorar la inclusión juvenil en estos sistemas podría generar un impacto económico de hasta un billón de dólares a nivel mundial.
Desafíos y oportunidades en el sector agroalimentario
El informe revela que la proporción de jóvenes empleados en los sistemas agroalimentarios ha disminuido del 54 % en 2005 al 44 % en 2021. A nivel global, solo el 44 % de los jóvenes trabajadores dependen de estos sectores para su empleo, frente al 38 % entre los adultos. Además, la inseguridad alimentaria ha aumentado notablemente entre los jóvenes, pasando del 16,7 % en 2014-2016 al 24,4 % en 2021-2023, siendo África la región más afectada.
La población joven del África subsahariana está proyectada para crecer un 65 % hacia 2050, lo que plantea aún más retos para garantizar su seguridad alimentaria y oportunidades laborales.
Impulso económico a través del empleo juvenil
Más del 20 % de los jóvenes no trabaja, estudia ni recibe formación, con una probabilidad dos veces mayor para las mujeres de pertenecer a esta categoría. Eliminar el desempleo juvenil podría incrementar el producto interno bruto (PIB) mundial en un 1,4 %, lo que equivale a aproximadamente 1,5 billones de dólares estadounidenses. De este aumento, se estima que alrededor del 45 % provendría de los sistemas agroalimentarios.
Para empoderar a esta franja etaria, es fundamental implementar intervenciones que fomenten su participación activa y mejoren su acceso a capacitación y recursos. También se requiere un enfoque más robusto hacia programas de protección social debido al limitado acceso juvenil a financiamiento tradicional.
Migración juvenil y su impacto en el sector agrícola
A pesar de que muchos jóvenes migran dentro de sus propios países, también se ha observado un aumento significativo en la migración internacional entre aquellos de 15 a 24 años. En África subsahariana, el 16,2 % son migrantes jóvenes; mientras que en América Latina y el Caribe esta cifra alcanza el 15,2 %.
Aproximadamente el 54 % de los jóvenes vive en áreas urbanas, con concentraciones notables en Asia oriental. En contraste, solo un 5 % representa la juventud rural, lo cual genera preocupaciones sobre una posible escasez futura de mano de obra si no se logran atraer a más jóvenes hacia profesiones agrícolas.
Afrontando las amenazas climáticas para asegurar la productividad agrícola
Cerca de 395 millones de jóvenes rurales viven en regiones donde se prevé una disminución significativa en la productividad agrícola, especialmente dentro de sistemas agroalimentarios tradicionales. Para abordar estos desafíos y aprovechar las oportunidades emergentes, es necesario:
- Aumentar las oportunidades económicas, mediante estrategias específicas que doten a los jóvenes con competencias adecuadas.
- Invertir en modernización, priorizando mejoras infraestructurales.
- Facilitar el acceso a recursos, creando planes sobre tierra y crédito dirigidos específicamente hacia ellos.
- Promever una migración ordenada, estableciendo rutas seguras que consideren las necesidades juveniles para mitigar la escasez laboral.
- Aumentar el acceso a tecnologías digitales, permitiendo así que los agricultores jóvenes modernicen sus prácticas y conecten con mercados relevantes.
La noticia en cifras
Cifra |
Descripción |
1300 millones |
Población mundial de jóvenes entre 15 y 24 años. |
85% |
Porcentaje de la juventud mundial que reside en países de ingresos bajos y medianos bajos. |
44% |
Proporción de jóvenes trabajadores empleados en los sistemas agroalimentarios en 2021. |
24.4% |
Tasa de inseguridad alimentaria entre los jóvenes en 2021-2023. |
Preguntas sobre la noticia
¿Cuál es el papel de los jóvenes en los sistemas agroalimentarios?
Los jóvenes son agentes fundamentales del cambio en el sector agrícola, siendo la próxima generación de productores, elaboradores, proveedores de servicios y consumidores. Su inclusión en los sistemas agroalimentarios puede mejorar la seguridad alimentaria y las oportunidades económicas.
¿Qué desafíos enfrentan los jóvenes en el ámbito agroalimentario?
Los jóvenes deben aumentar la producción de alimentos para una población creciente, sustituir a una fuerza de trabajo envejecida y adaptarse a fenómenos climáticos extremos, crisis climática, escasez de agua y urbanización.
¿Cómo ha cambiado la situación laboral de los jóvenes en el sector agroalimentario?
La proporción de jóvenes trabajadores empleados en los sistemas agroalimentarios ha disminuido del 54% en 2005 al 44% en 2021. Actualmente, el 44% de los jóvenes que trabajan dependen de estos sistemas para conseguir empleo.
¿Qué impacto tiene la inseguridad alimentaria entre los jóvenes?
La inseguridad alimentaria entre los jóvenes ha aumentado del 16,7% (2014-2016) al 24,4% (2021-2023), afectando especialmente a la juventud en África.
¿Qué medidas se sugieren para empoderar a los jóvenes en el sector agroalimentario?
Se sugiere llevar a cabo intervenciones que fomenten su participación, aumentar el acceso a capacitación y recursos, impulsar la productividad y establecer más programas de protección social.
¿Cuál es la proyección del crecimiento poblacional juvenil en África subsahariana?
Se prevé que las poblaciones jóvenes del África subsahariana crezcan un 65% de aquí a 2050.
¿Qué porcentaje de jóvenes ni trabaja ni estudia ni recibe formación (nini)?
Más del 20% de los jóvenes son considerados nini, con una probabilidad dos veces mayor para las mujeres.
¿Cómo podría eliminarse el desempleo juvenil y qué impacto tendría esto en la economía mundial?
Eliminar el desempleo juvenil podría impulsar el PIB mundial en un 1,4%, lo que equivale a 1,5 billones de dólares estadounidenses adicionales, con un 45% de este incremento proveniente de los sistemas agroalimentarios.