“El Víbora” hace un llamamiento a sus lectores para evitar el cierre de la publicación

El número de “El Víbora” correspondiente a este mes de febrero es un número especial. Todos los que hacen la única revista alternativa de cómic que sale en España han dedicado algunas páginas del ejemplar a un tema mucho más serio de lo que suele ser habitual en esta publicación. Si en tres meses “El Víbora” no consigue alcanzar unas ventas de 9.000 ejemplares, ya no volverá a salir más.

Este llamamiento se produce apenas diez días después de que el editor de la revista, José María Berenguer, avisase por primera vez acerca de las graves dificultades por las que atraviesa “El Víbora”. Entonces se había decidido un plazo de tres números más –tres meses- en los que la publicación tendría que remontar sus cifras. Si no lo conseguía, no habría más remedio que cerrar.

Por eso, “El Víbora” abre en su número de este mes con una portada completamente roja en la que sólo aparece una pregunta: '¿El Fin?´, junto a un editorial en la que se explican sus dificultades económicas.

“El Víbora” vende actualmente 6.000 ejemplares mensuales en comparación a su época de esplendor a los mediados de los años 80, cuando llegó a vender 42.000 revistas al mes. El problema que se plantea ahora es una reducción de las ventas que empezó hace más de un año, demasiado deprisa y justo en un momento en que “El Víbora” se había quedado sin competencia en el mercado de las publicaciones de cómic.

A pesar del difícil momento por el que pasa “El Víbora”, ésta no es la misma situación que vive su empresa editora, La Cúpula, que no tiene problemas económicos y que, si finalmente desaparece esta revista, continuará su actividad con las otras publicaciones de su propiedad que le son más rentables.

Hace días, José María Berenguer apuntó algunos de los factores que han podido incidir en el descenso de las ventas de “El Víbora”. Entre ellos, la preferencia de los artistas más jóvenes de publicar sus cómics en los llamados cómic-book, que son difíciles de encontrar fuera de las grandes tiendas.