La editorial Desnivel presenta la obra 'El Centinela de piedra'

Dice la leyenda que entre las nieblas del Aconcagua habita el Futre, un individuo vestido de frac y chistera que desvía a los infortunados aspirantes a la cima de sus caminos y hace que se pierdan en la inmensidad de las paredes del Cerro. Claro que a veces no es fácil distinguir entre leyenda y realidad… Esto es lo que les ocurre a los protagonistas de este libro, una mini expedición de amigos -tres navarros y un francés- y a una joven chilena. Sus vidas se cruzan inesperadamente por mediación fortuita de un diario muy personal, y bajo la sombra del gigante andino vivirán juntos inolvidables experiencias. La belleza y la felicidad se mezclarán con la tragedia, como solo ocurre en el mundo de las altas cumbres.
El Premio Desnivel de Literatura, dotado con 6.000 € y la publicación de la obra, se consolidó en su quinta edición, como el principal reconocimiento a la literatura de montaña en lengua castellana, y un buen medio de descubrir nuevos autores de la literatura. La primera edición, en 1999, descubrió al escritor David Torres por su novela Nanga Parbat, la opera prima del que ha sido finalista al Premio Nadal 2003. Arantza López Marugán, con Cuerdas Rebeldes, Rosa Fernández Arroyo, con Cuentos de las montañas de cuento y Marta Iturralde Navarro con Mujeres y Montañas, fueron otras de las ganadoras del Premio Desnivel.
Este año el jurado ha estado formado por el alpinista y botánico, Salvador Rivas, el director del Parque Nacional de Sierra Nevada, Javier Sánchez, el escalador, periodista y escritor catalán, Eliseu Climent, y el director de Ediciones Desnivel, Darío Rodríguez. Entre las 37 obras que concursaban, el Jurado quiso además realizar una mención especial a dos obras de no ficción: El brujito de las Tururas, de Eladio Ocaña Serrano, y Bajé al infierno y conocí a Cristo, de Francisco Montero Calvache, "por los valores humanos de solidaridad, fraternidad, amor y vida activa que transmiten".