Los trabajadores de Onda Cero llegan a un acuerdo sobre la reducción de plantilla

La resolución de los problemas de Onda Cero sigue dando que hablar. Trabajadores, sindicatos y patronal, parecen ponerse de acuerdo para afrontar las consecuencias del plan de viabilidad que la cadena está llevando a cabo. Dicho plan contemplaba la posibilidad de dejar a 170 trabajadores en la calle, pero las diferentes partes implicadas han conseguido reducir el número a 114.

La votación a favor del preacuerdo así lo ha demostrado. 592 votos a favor, 106 en contra, 82 votos en blanco y uno nulo, suman la representación del 89% de la plantilla. En total, un 75,8% de aprobación, un 13,6 en contra y un 10,5 en blanco, es el balance de esta decisión.

El acuerdo contempla, entre otras cosas, la indemnización mínima de 7.500 euros para los afectados por este recorte. De esta forma, quienes cobren menos de 20.000 euros anuales, cobrarán 60 días por año trabajado, entre 20.000 y 25.000, 50 días, de 25.000 a 30.000 tendrán 40 días y los que ganen más de 30.000 euros anuales recibirán 30 días
También, se abre un plazo de 10 días para bajas voluntarias desde la aprobación de este plan de viabilidad por parte del Ministerio de Trabajo.

Por otra parte, la dirección se compromete a no despedir a más empleados, salvo en casos de expedientes disciplinarios, hasta finales del 2006, y a no externalizar los servicios prestados por quienes se vean afectados por el plan. Además el número de becarios no será superior al de años anteriores, evitando un posible conflicto por la incorporación de dicho personal, que recibe un salario mínimo por dichos trabajos.

Con esta decisión concluyen las semanas de negociaciones entre ambas partes desde que se hiciese público el plan de viabilidad el pasado 28 de abril, aunque próximamente se iniciarán nuevas conversaciones para acordar un convenio colectivo.

Fuentes del comité de empresa señalaron que ‘la gente ha votado con la cabeza, aunque el corazón pedía otra cosa. No es un buen acuerdo porque prevé despidos, pero es el mal menor, ya que garantiza una salida digna de los compañeros’.