Internet, factor determinante en la crisis del mercado de revistas estadounidenses

Casi ninguna revista se salva. Desde las dedicadas a contenidos para la audiencia femenina hasta las económicas, el sector está viviendo una crisis en todas sus áreas de contenidos. Sin embargo, hay excepciones que confirman la regla, como es el caso del magazine “O” de la popular presentadora televisiva Ophrah Winfrey, que en el primer semestre del año logró ganancias de 2,3 millones de dólares. Como publicaba “Gaceta de Prensa” en el mes de julio, el éxito de esta revista se debe a su decisión de ofrecer contenidos diferentes para la mujer moderna a la que no sólo le interesan temas de belleza, moda o cocina. Con esta línea editorial, “O” ha logrado desbancar a revistas tan consolidadas como “Elle” o “Cosmopolitan”.
Sin embargo, la mayoría de las revistas femeninas están teniendo serias dificultades para mantener sus audiencias. Según el Audit Bureau of Circulations, cabeceras como la citada “Cosmopolitan”o “Vanity Fair” han caído preocupantemente en los primeros seis meses de 2003. El incremento de precios por ejemplar, Internet y el aumento de títulos en los kioscos, son algunas de las razones que apuntan los expertos para explicar este fenómeno.
Las revistas generalistas también se encuentran en crisis. Tótems como “Reader´s Digest” han visto mermadas sus ventas en el primer semestre hasta 11,1 millones de dólares. Las revistas económicas también se han visto afectadas en sus ventas, en este caso la explicación podría ser que el público, en tiempos de crisis, sólo quiere informarse sobre economía doméstica o inversión cuando la Bolsa sube, por lo que la mala racha de las revistas económicas durará lo que dure la crisis del país.
Las revistas para adultos están sufriendo también los envites de Internet. La revista “Penthouse” se declaró en bancarrota la semana pasada porque no podía mantener el nivel de sus ventas ante el empuje de este tipo de contenidos en la red.