La situación de los periodistas en Afganistán se ha deteriorado drásticamente desde la toma de Kabul por los talibanes el 15 de agosto de 2021. La represión contra la prensa ha llevado a muchos profesionales a solicitar asilo en otros países, aunque las oportunidades de acogida son cada vez más limitadas. Reporteros Sin Fronteras denuncia la creciente violencia y censura impuesta por el régimen talibán, que ha resultado en detenciones y amenazas a periodistas, especialmente mujeres. A pesar de los esfuerzos por encontrar refugio seguro, muchos enfrentan la denegación de visados y riesgos de expulsión, lo que agrava su vulnerabilidad. La comunidad internacional debe reevaluar las políticas de asilo para garantizar la protección de estos profesionales perseguidos.
Desde la toma de Kabul el 15 de agosto de 2021, los talibanes han intensificado su represión contra los medios de comunicación, lo que ha llevado a numerosos periodistas a buscar asilo en otros países. En estos cuatro años, las solicitudes de asilo han aumentado constantemente, pero las oportunidades para ser acogidos se han vuelto cada vez más limitadas. Reporteros Sin Fronteras (RSF) ha denunciado esta situación y ha instado a naciones de tránsito y acogida a facilitar la salida de estos profesionales, quienes enfrentan graves riesgos en su país natal.
Desde su regreso al poder, los talibanes han implementado una censura severa y han obstaculizado el trabajo periodístico, especialmente el de las mujeres. En el año 2024, se reportó el cierre de doce medios y la detención de más de 165 periodistas, muchos de los cuales han sido objeto de torturas o amenazas. Recientemente, cuatro trabajadores de medios fueron encarcelados durante un operativo en Kabul.
Un periodista anónimo, que trabaja en un canal de noticias en Kabul, compartió su experiencia con RSF. Este profesional ha sido intimidado por talibanes armados mientras cubría eventos y ha recibido amenazas dirigidas a él y su familia. Su objetivo de “dar voz a la gente” se ha vuelto cada vez más complicado. Ha presenciado cómo uno de sus colegas fue despedido por no cubrir una reunión oficial del régimen talibán.
A medida que las restricciones aumentan, este periodista considera la posibilidad del exilio. Actualmente, ha trasladado a su familia a un lugar que considera seguro y reside solo en Kabul. Sin embargo, señala que sus recursos económicos le permitirían huir únicamente a Pakistán, sin desconocer las duras condiciones que enfrentan los periodistas afganos exiliados.
Los periodistas afganos en el extranjero están lidiando con la denegación de visados y problemas para renovar sus permisos de residencia en países donde buscan asilo. Esta situación es particularmente crítica en Pakistán, donde muchos enfrentan la reducción del tiempo permitido para sus visados y un incremento en los costos asociados.
De los 80 periodistas afganos apoyados por RSF en Pakistán desde principios de 2025, trece han sido expulsados a Afganistán pese a tener solicitudes pendientes para otros países. Además, se ha observado un aumento en las negativas por parte de Francia para otorgar visados a estos profesionales refugiados.
Uno de los periodistas apoyados por RSF recordó cómo fue expulsado: durante una celebración nocturna del Ramadán, agentes policiales pakistaníes irrumpieron en su hogar y lo agredieron junto con su familia antes de llevarlos detenidos.
Una vez devuelto bajo control talibán, este periodista enfrenta un alto riesgo de violencia. Un informe reciente publicado por la ONU titulado “No hay refugio seguro”, destaca que los profesionales del periodismo son uno de los grupos más vulnerables a represalias y violaciones de derechos humanos tras ser repatriados.
A medida que se prevé que millones de afganos sean forzados a regresar a su país en 2025 desde Pakistán e Irán, la situación para los periodistas sigue siendo alarmante.
Desde 2021, RSF ha brindado apoyo a 654 periodistas afganos; el 86 % se encuentra actualmente en el exilio. Gracias a esta asistencia, 169 han logrado reasentarse en Francia y algunos continúan ejerciendo su labor informativa mediante iniciativas como Voices in Exile.
Cifra | Descripción |
---|---|
165 | Periodistas detenidos o arrestados desde el regreso de los talibanes al poder. |
12 | Medios cerrados solo en el año 2024. |
80 | Periodistas afganos a los que RSF presta apoyo en Pakistán desde principios de 2025. |
13 | Periodistas expulsados a Afganistán durante el mismo periodo. |
Desde la toma de Kabul, los talibanes han reforzado su control sobre los medios de comunicación y han impuesto una represión severa contra los periodistas, obligándolos a huir del país.
Los periodistas afganos en el exilio enfrentan la denegación de visados y dificultades para renovar sus permisos de residencia, lo que puede llevar a su expulsión a Afganistán, donde corren un alto riesgo de represalias.
RSF denuncia la implacable represión contra los profesionales de los medios por parte del régimen talibán y pide a otros países que ofrezcan protección a estos periodistas amenazados.
Muchos periodistas afganos tienen solicitudes de asilo pendientes, pero las posibilidades de acogida son cada vez más escasas debido a restricciones en varios países.
Los periodistas que son expulsados a Afganistán enfrentan graves riesgos, incluyendo amenazas, detenciones y torturas por parte del régimen talibán.
A pesar del apoyo brindado por organizaciones como RSF, muchos países aún no han reevaluado adecuadamente sus políticas de asilo para proteger a los periodistas afganos.