Diez personas, incluyendo tres niños, murieron en ataques con drones rusos en las ciudades ucranianas de Jarkov y Zaporiyia. La ONU ha exigido la protección de los civiles y el respeto del derecho internacional humanitario tras estos asaltos, que han causado devastación y daños significativos a la población civil. Los ataques coinciden con una reunión entre el presidente ucraniano Volodimir Zelenski y líderes europeos en Washington, mientras que julio se ha registrado como el mes con más víctimas civiles desde mayo de 2022, con un aumento notable de muertes debido a bombardeos aéreos. Las autoridades informan que los drones fueron responsables de una parte considerable de las bajas civiles en el conflicto.
Anoche, las ciudades ucranianas de Jarkov y Zaporiyia fueron escenario de devastadores ataques con drones rusos que resultaron en la muerte de diez personas, incluyendo a tres niños, según un informe del Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF). Esta trágica noticia resalta nuevamente el impacto desproporcionado del conflicto en la población civil.
La agencia UNICEF expresó su profunda preocupación por la pérdida de vidas jóvenes en Ucrania. “Es imperativo detener los ataques contra áreas pobladas. Debemos proteger a los niños”, afirmó un portavoz del organismo. En una declaración similar, la Oficina de Asuntos Humanitarios (OCHA) condenó los ataques en Jarkov, subrayando los daños sufridos por la población civil y las infraestructuras.
Estos asaltos se produjeron justo antes de una reunión entre el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, y un grupo de líderes europeos, junto al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en Washington D.C. La semana pasada, Trump había viajado a una base aérea en Alaska para encontrarse con su homólogo ruso, Vladimir Putin, con el objetivo de discutir un posible acuerdo para poner fin a la guerra en Ucrania. Sin embargo, aunque ambos líderes consideraron que hubo avances, no se llegó a ningún acuerdo concreto.
Las imágenes difundidas por las autoridades ucranianas muestran un complejo de apartamentos en Jarkov con un gran agujero en el techo y pisos superiores gravemente dañados. También se aprecian restos quemados, aunque los incendios han sido sofocados.
Jarkov, situada en el noreste del país a aproximadamente 30 kilómetros de la frontera rusa, es la segunda ciudad más importante de Ucrania y ha sufrido bombardeos continuos desde el inicio de la invasión rusa el 24 de febrero de 2022. En cuanto a Zaporiyia, ubicada al sur del país, las autoridades informan que los ataques causaron tres muertes y alrededor de veinte heridos, a pesar de que se lograron derribar casi 90 drones y misiles durante la ofensiva.
Los observadores de derechos humanos de la ONU han señalado que julio fue el mes con mayor número de víctimas civiles desde mayo de 2022, contabilizando 286 muertos y 1,388 heridos. Este incremento se atribuye principalmente a los bombardeos aéreos, donde los drones de corto alcance representaron el 24% del total de víctimas.
El aumento en las bajas civiles entre junio y julio se ha concentrado especialmente en zonas controladas por el gobierno ucraniano a lo largo del frente, donde las fuerzas rusas buscan expandir su territorio. Según la Misión de Observación de Derechos Humanos en Ucrania, los ataques con misiles y otras municiones han causado cerca del 40% de las muertes y lesiones entre no combatientes, afectando gravemente ciudades como Dniéper, Jarkov y Kiev.
Asimismo, los drones han emergido como una amenaza significativa; estos dispositivos fueron responsables de casi una cuarta parte de todas las muertes y lesiones civiles registradas durante este periodo crítico.
Cifra | Valor |
---|---|
Número de muertos en Jarkov y Zaporiyia | 10 (3 niños) |
Número de heridos en Zaporiyia | 20 |
Total de víctimas civiles en julio | 286 muertos, 1388 heridos |
Porcentaje de víctimas por drones de corto alcance | 24% |
Diez personas, incluyendo tres niños, murieron en los ataques con drones rusos a las ciudades de Jarkov y Zaporiyia.
El Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF) y la Oficina de Asuntos Humanitarios (OCHA) han denunciado los ataques, exigiendo protección para los civiles y el respeto del derecho internacional humanitario.
Se reportaron daños significativos a la población civil y a las viviendas, incluyendo un complejo de apartamentos en Jarkov que sufrió grandes daños estructurales.
Los ataques ocurrieron justo antes de una reunión entre el presidente ucraniano Volodimir Zelenski y líderes europeos con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en Washington D.C.
Julio registró el mayor número de víctimas civiles desde mayo de 2022, con 286 muertos y 1388 heridos, siendo los bombardeos aéreos la principal causa del aumento de víctimas.