España se sitúa un 14% por debajo de la media europea en el acceso a Internet según un estudio

Sólo un 31,3% de los españoles disponen de acceso a Internet, según el informe Métrica de la Sociedad de la Información 2004, presentado por el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio y la Asociación de Empresas de Electrónica, Tecnologías de la Información y Telecomunicaciones de España (Aetic). Una cifra que queda muy por detrás de la media europea con un 45%, ya que a pesar de las infraestructuras el grado de utilización de los servicios requiere aún de un importante esfuerzo para alcanzar la convergencia europea.

El director general para el Desarrollo de la Sociedad de la Información, Rafael Sagrario, el vicepresidente de Aetic, Josep María Vilá, y el subdirector general de Empresas de la Sociedad de la Información, Víctor Izquierdo, han resaltado en la presentación que uno de los indicadores "más preocupantes" sobre el retraso de España se centra en el ámbito de Internet, especialmente en el número de servidores en uso. Por otra parte, aumenta el número de abonados a la telefonía móvil por cada cien habitantes y el número de cajeros automáticos por millón de habitantes, pero seguimos suspendiendo en el gasto per cápita en Tecnologías de la Información con respecto a Europa, en el número de hogares con ordenador personal y en la penetración de ordenadores portátiles. De este modo, mientras que el valor monetario del mercado interior de TI en relación con el PIB es del 69,8% de lo que es en la Unión Europea, el gasto español en TI per cápita se reduce al 53,6%. En el mercado de las telecomunicaciones, el índice respecto al PIB es ligeramente superior a la media europea (un 4,2%), mientras que el gasto en telecomunicaciones per cápita se reduce al 79,1% de dicha media.

El informe pretende ofrecer un modelo sistemático de medición del nivel de implantación de la Sociedad de la Información en España y su relación con la media europea. En los datos se demuestra además, que seguimos por detrás en la implantación de la banda ancha, a pesar de que el número de contrataciones sigue subiendo, así como en los terminales de acceso, en la utilización de los servicios suministrados por los distintos operadores, y sobre todo en las operaciones de comercio electrónico.