Los usuarios desaprueban el canon de financiación para RTVE

La Asociación de Usuarios de la Comunicación (AUC) ha mostrado su desacuerdo con la aplicación de un canon para la financiación de RTVE. Una medida que no deja de levantar ampollas, y que para la organización no supone una respuesta al problema de la deuda de RTVE, y no sustituiría la financiación vía impuestos y publicidad.

El endeudamiento histórico de RTVE, asciende a 7.500 millones de euros según el anteproyecto de presupuestos del Ente público para 2005. El conocido como ‘Comité de Sabios’, conjunto de expertos nombrado por el Gobierno para elaborar el anteproyecto de Ley de la renovación de RTVE, propuso crear un canon, que pudiese desahogar las cuentas del Ente. Un proyecto que está siendo estudiado, y para el que el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) está realizando una macroencuesta en la que se abordarán las cuestiones más relevantes de esta reforma.

Tras la revisión de los informes remitidos por parte de RTVE Y del Ministerio de Hacienda, sus responsables pretenden tener un borrador de cara al próximo mes de noviembre, al estilo de la televisión pública británica.

La idea es acabar con la financiación publicitaria en la Primera de TVE, que pasaría a sustentarse exclusivamente con capital público. Una medida que, sin embargo, no afectaría al segundo canal de la misma cadena, La2, que no recibiría aportación económica alguna, y que aún conservando su titularidad pública, pasaría a estar gestionada por capital privado.

Esta medida seguiría el patrón establecido por la BBC en Reino Unido, dónde la cadena se financia sólo con ingresos procedentes del canon mientras que Channel 4 se disputa la publicidad con los operadores comerciales. El Gobierno, no obstante controla de fondo y forma esta gestión a través de la Comisión Independiente de Televisión y de la Secretaría de Estado de Cultura, Medios y Deportes, y la designación de los directivos debe obtener el visto bueno de la Administración.

El canon oscilaría entre los 50 y los 200 euros para lo que se han tenido en cuenta las tarifas de los países con mayor carga impositiva y de aquellos con un canon más bajo. Para la BBC, por ejemplo, cada familia de Reino Unido abona 116 libras al año (unos 173 euros), aunque en el caso de España bastaría con la mitad, ya que teniendo en cuenta los cerca de 15 millones de hogares españoles, se compensarían los 757 millones de euros en números rojos con los que RTVE cerrará este ejercicio.
‘Para España existe la ventaja de que ese canon podría ser implantado sobre la adquisición de los nuevos televisores y descodificadores digitales, aprovechando la próxima defunción del mundo analógico, afirmó Del Corral. En su opinión, el Gobierno debería aprobar un 'Plan Renove' que facilitará a los consumidores la sustitución de equipos’.
‘Asimismo, este canon debería desdoblarse, de forma que un tramo fuera pagado en todo el territorio nacional, destinado a la televisión estatal, y un segundo que quedaría restringido a las comunidades autónomas con televisión propia. Este sistema daría como resultado la dimensión justa que quiere el ciudadano respecto a la televisión pública’, aseguró el secretario general de UTECA.

De esta manera, el residente en la Comunidad de Madrid pagaría un canon por ver TVE y Telemadrid. El canon sería más bajo para aquellos residentes en comunidades que no tienen televisión autonómica. ‘Eso demostraría si las personas quieren de verdad una televisión autonómica’.

Sin embargo, los usuarios consideran que en la mayoría de los países, ‘el canon presenta importantes inconvenientes’ como que al ser un impuesto indirecto es regresivo, y que es ‘rígido’ a la hora de adecuar la financiación a las necesidades de inversión y requiere una importante estructura de aplicación, tanto de información como recaudatoria. Además sería ‘fácilmente vulnerable’, y se produciría fraude, al igual que en otro países dónde alcanza el 30%, debido a la renovación de los receptores que haría falta hacer.

La AUC defiende una financiación mixta basada sobre todo en impuestos directos, ‘más progresiva y solidaria y menos llamativa’.