El grupo terrorista Daesh, conocido como ISIS, mantiene su capacidad operativa a pesar de la muerte de varios líderes, según un informe presentado en el Consejo de Seguridad de la ONU. África Occidental se ha convertido en un centro de actividad para el grupo, que continúa expandiendo su propaganda y atrayendo combatientes extranjeros. En Somalia, Daesh llevó a cabo un ataque significativo en Puntlandia, mientras que en Siria intenta restablecer su influencia y generar tensiones sectarias. El subsecretario general de la ONU instó a reforzar los esfuerzos para prevenir el extremismo violento, destacando que eliminar líderes no es suficiente para erradicar la amenaza del terrorismo.
La amenaza del grupo terrorista Estado Islámico de Irak y el Levante (ISIS), conocido como Daesh, se mantiene activa en diversas regiones del mundo. En un informe presentado ante el Consejo de Seguridad de la ONU, el subsecretario general para la lucha contra el terrorismo, Vladimir Voronkov, evidenció la capacidad de adaptación del grupo a pesar de los esfuerzos internacionales para desmantelarlo.
Voronkov destacó que, a pesar de la muerte de varios líderes de Daesh en los últimos años, el grupo ha logrado conservar su operatividad. La reciente eliminación del vicelíder en Irak no ha impactado significativamente su estructura; según informes de Estados miembros, se estima que Daesh podría recuperarse completamente en un plazo de seis meses.
África se consolida como la región más afectada por las actividades del grupo, con una notable intensidad operativa especialmente en África Occidental y el Sahel. Durante el periodo analizado en el informe, se registró un resurgimiento de su actividad en el Gran Sáhara, donde la provincia africana del grupo ha emergido como una fuente prolífica de propaganda terrorista y ha atraído combatientes extranjeros principalmente locales.
En Somalia, Daesh llevó a cabo un ataque masivo en Puntlandia anticipando una contraofensiva militar. Este ataque contó con la participación significativa de combatientes extranjeros. Las fuerzas de seguridad somalíes respondieron con una contraofensiva que resultó en la muerte de 200 combatientes de Daesh y la detención de más de 150. A pesar del debilitamiento, el grupo continúa beneficiándose de redes regionales que le permiten seguir representando una amenaza latente.
En Oriente Medio, Daesh permanece activo tanto en Irak como en Siria, buscando restaurar su capacidad operativa en la región desértica conocida como Badia y renovando sus esfuerzos para desestabilizar a las autoridades locales. En Siria, el grupo aprovecha los vacíos de seguridad para llevar a cabo operaciones encubiertas e incitar tensiones sectarias.
Voronkov enfatizó que la preocupación expresada por el Secretario General sobre la posibilidad de que arsenales caigan en manos terroristas «lamentablemente se ha materializado».
El subsecretario general hizo un llamado a los miembros del Consejo de Seguridad para que incrementen las inversiones destinadas a prevenir el extremismo violento que conduce al terrorismo, sugiriendo que es crucial actuar antes que remediar sus efectos. Subrayó que enfocarse únicamente en eliminar liderazgos no es suficiente para erradicar esta amenaza persistente.
Concluyó resaltando la urgencia de establecer una cooperación global basada en enfoques antiterroristas compatibles con el derecho internacional y los derechos humanos, así como sensibles al género.
Cifra | Descripción |
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200 | Número de combatientes de Daesh que murieron durante la contraofensiva de las fuerzas de seguridad somalíes. |
150 | Número de combatientes de Daesh que fueron arrestados durante la contraofensiva en Somalia. |
6 meses | Tiempo estimado para que Daesh se recupere tras la muerte de su vicelíder en Irak. |
El informe presentado por el subsecretario general de la ONU para la lucha contra el terrorismo indica que Daesh ha mantenido su capacidad operativa y sus redes logísticas, a pesar de la muerte de varios líderes en los últimos años.
África, especialmente África Occidental y el Sahel, se ha convertido en una región con intensa actividad de Daesh. El grupo ha resurgido en el Gran Sáhara y ha atraído combatientes extranjeros, además de establecer redes logísticas y de financiación en prisiones de Libia.
Daesh organizó un ataque a gran escala en Puntlandia, anticipando una contraofensiva militar. Aunque sufrió bajas significativas, sigue beneficiándose de redes de apoyo regional.
En Siria e Irak, Daesh intenta restaurar su capacidad operativa y desestabilizar a las autoridades locales aprovechando vacíos de seguridad y realizando operaciones encubiertas.
Se instó a los miembros del Consejo de Seguridad a invertir más en la prevención del extremismo violento que conduce al terrorismo, enfatizando que enfocarse únicamente en eliminar liderazgos no es suficiente.