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La familia de Torrente Ballester crea una sociedad para frenar la batalla de las editoriales por las obras del escritor

miércoles 22 de octubre de 2014, 12:37h
Muchos de sus escritos han sido descatalogados o son muy difíciles de encontrar además de encontrarse desperdigados entre media docena de editoriales. Sus familiares pretenden relanzar las novelas y mantener vivo el espíritu de uno de los más prestigiosos escritores de este siglo.
En 1999 desaparecía el escritor y dramaturgo Torrente Ballester con más de 25 novelas a sus espaldas. Un autor que se mostraba obsesivo por mantener la calidad de sus novelas, y cuya obra no pasó desapercibida para los editores que llegaron a publicar su obra en media docena de editoriales. Sin embargo muchas han sido descatalogadas, cuesta encontrarlas o incluso tienen pendiente la renovación de los derechos de autor. Un ejemplo fue la carta remitida por la editorial Destino en la Navidad de 1993, dónde se le comunicaba la destrucción de 40.000 volúmenes firmados por él, entre ellos, diversas ediciones de Don Juan, uno de sus títulos favoritos. ‘Le dolió mucho porque, además, había un contrato que impedía la destrucción sin la autorización del autor’, recuerda uno de sus hijos.

El resto están en manos de Planeta que mantiene los derechos de los títulos publicados después de que el escritor ganara el premio de ese grupo editorial con Filomeno a mi pesar (1988); Alianza mantiene en catálogo Los gozos y las sombras, que reedita con frecuencia, y Destino tiene un considerable número de títulos con los contratos vencidos y se negocia ahora la renovación. Las obras casi ilocalizables --salvo en librerías de viejo-- son las de los años 50 --Javier Mariño, por ejemplo--, y las editadas en los años 80 por Plaza y Janés: La princesa durmiente va a la escuela, Quizá nos lleve el viento al infinito, Los cuadernos de un vate vago, Yo no soy yo, evidentemente, y El golpe de estado de Guadalupe Limón.

Esta situación ha llevado a que su numerosa familia, con más de once hijos, hayan constituido una sociedad, cuyo consejo de administración de esa empresa está formado por tres de ellos, a la presidencia de Marisa Torrente Malvado, para mantener viva la obra del padre, hacer un nuevo lanzamiento de la misma y potenciar la traducción en lenguas extranjeras.
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