Telefónica ante la mayor regulación de empleo de su historia

Sin embargo, la pretensión de disminución de plantilla lleva fraguándose desde 1995, año en que la compañía tenía casi 70.000 trabajadores; produciéndose desde entonces hasta nuestros días una redución de 28.000. El objetivo más claro es conseguir ganar competitividad en el complicado panorama actual de las comunicaciones fijas y móviles. Para evitar un cambio traumático, telefónica desvinculará laboralmente de la empresa por medio de principios de "universalidad, voluntariedad y no discriminación del empleado".
Telefónica ha mantenido que esta necesidad parte del esfuerzo realizado por la compañía para liberalizar el sector de las comunicaciones, mientras las nuevas compañías que penetraban en el mercado asumían riesgos menores; si a esta situación unimos, según Telefónica, una posible falta de voluntad política en la administración para acomodar el marco regulatorio a la situación real, nos encontramos, con una situación "necesaria para la pervivencia empresarial de la compañía en unas condiciones saneadas".
Las últimas estrategias de bajadas de precios no han funcionado como se esperaba, debido a la ausencia de elasticidad del mercado. Alierta busca por medio de un sistema de precios complejo un reparto del mercado basado en la naturaleza misma de la oferta y la demanda, que sitúe cada compañía en su lugar, en función de la capacidad de aportar nuevas alternativas.
La CGT, por su parte, anunció que se opondrá al plan presentado, considerando que la compañía usa las exigencias impuestas por el regulador para sanear su cuenta de resultados. Según el sindicato, dicha situación debe ser afrontada y por la empresa y no sobre los trabajadores. El comité intercentros está compuesto por cuatro representantes de CCOO, otros cuatro de UGT, dos de CGT, uno de UTS, uno de STC y otro de ATS.
Lo cierto es que telefónica ha perdido mas de 300.000 líneas a manos de la competencia, situando su cuota de mercado por primera vez por debajo del 80%; mientras la compentecia posee ya, sin necesidad de número prefijado, dos millones de lineas.
La CGT ha convocado el viernes día 27 un paro, con el fin de exigir la retirada del proyecto de regulación, y para, según el organismo, "evitar transformar dicho empleo en colocaciones precarias a través de la subcontratación".